Claves para la limpieza de hoteles

Algunas hojas en el vestíbulo, polvo en las plantas de interior, una huella de dedos en la ventana: estos son los pequeños detalles que determinan si los huéspedes del hotel sienten que han encontrado un lugar cómodo para quedarse. Esta primera impresión es decisiva.

Aparcamiento.
Ya sean viajeros de negocios o de vacaciones, a menudo lo primero que hacen los huéspedes al llegar es aparcar el coche. La suciedad y el polvo deben eliminarse del parking y el vestíbulo utilizando barredoras manuales con acompañante o barredoras con conductor, según su tamaño. Kärcher recomienda utilizar un soplador de hojas sin cable para ayudar a eliminar las hojas en otoño. Son fáciles de manejar y generan bajos niveles de ruido que no molestarán a los huéspedes del hotel. Si una empresa también tiene espacios verdes, estos también deben ser mantenidos regularmente por un experto.

Recepción
Las alfombras son muy comunes y frecuentes a la entrada de hoteles. Si es necesario, se pueden limpiar con una escoba eléctrica o una aspiradora con cepillo vertical para mantenerlos impecables. Cuando el clima se vuelve húmedo, también se puede usar una aspiradora en seco y húmedo para una limpieza ocasional. Los hoteles tienden a tener pasillos enmoquetados que se pueden mantener limpios con una aspiradora de tipo cepillo vertical.

Check-in
Cuando se trata de higiene y prevención de la transmisión de gérmenes, es la zona de recepción la que juega un papel más importante. Es conveniente ofrecer a los huéspedes un producto desinfectante en el mostrador de recepción. Las superficies de contacto que son tocadas por varias personas deben limpiarse y desinfectarse con regularidad. Si se utiliza un detergente de limpieza adicional, este no debe ser muy alcalino o ácido. Para el personal del hotel, el área detrás del mostrador también debe ser revisada por cualquier cosa que pueda ser relevante durante los cambios de turno. 

Pasillos

Dependiendo de su tamaño, los hoteles pueden tener kilómetros de pasillos, que a menudo están tapizados con alfombras. Para ahorrar tiempo y esfuerzo al limpiarlos, Kärcher recomienda el uso de aspiradoras verticales. Las fregadoras-aspiradoras como las que se usan en el vestíbulo se pueden usar para otros revestimientos de suelos, ya que son adecuadas para el tamaño y la condición de estas áreas.

Escaleras

En las escaleras, los suelos enmoquetados, suelos de materiales elásticos o piedra también se pueden mantener limpios con aspiradoras de mochila que funcionan a batería, que son cómodas para el usuario. Sus principales ventajas son que no hay peligro de tropiezo con un cable y que las rutas innecesarias desde y hacia el último o el siguiente enchufe son cosa del pasado. Una alternativa que se ha lanzado recientemente al mercado es una mini fregadora, que permite un trabajo rápido y ergonómico. Dependiendo de la hora del día, si el tráfico peatonal es alto, recomendamos limpiar y desinfectar los pasamanos de las escaleras con regularidad.

Ascensores

Debido a su espacio reducido y uso frecuente, los ascensores son un área especialmente complicada. Todas las superficies de contacto deben limpiarse y desinfectarse varias veces al día. Las alfombras se pueden limpiar con una aspiradora sin cable para eliminar la suciedad, mientras que otros revestimientos para suelos se pueden limpiar de manera rápida y eficiente utilizando equipos de limpieza para superficies grandes. Si el ascensor está equipado con cristal o espejos, estas superficies deben limpiarse en profundidad con una limpiadora de cristales profesional. Estos absorben el agua después de la limpieza, evitando así que las salpicaduras de agua creen un peligro de resbalones o dejen suciedad.

Para evitar la transferencia de gérmenes, se recomienda identificar los útiles de limpieza con determinados colores en función del tipo de limpieza: azul para las superficies, amarillo para los baños, rojo para los urinarios e inodoros y verde para desinfección

Habitaciones
La limpieza de mantenimiento diario se realiza bajo presión de tiempo; por lo tanto, es aún más importante asegurarse de que sea un proceso sistemático que creará un entorno reconfortante y confortable para los huéspedes del hotel. Por lo general, las camas están recién hechas y luego se limpian las superficies del dormitorio y el baño. Este proceso suele implicar dos técnicas. El primero, el método del color, ayuda al personal a evitar la transferencia de gérmenes de un lugar a otro: el azul se usa para las superficies, el amarillo se usa para los baños (lavabos y duchas), el rojo se usa para los urinarios y los inodoros y el verde se usa para aplicaciones especiales, como desinfección.

La segunda técnica de trabajo útil es el método de 16 pliegues para sábanas, que es mucho más ergonómico para el personal del hotel que llevar cubos pesados ​​de agua. El paño de limpieza se dobla por la mitad tres veces (una hacia abajo y dos hacia un lado) de modo que haya un total de 16 lados. En un cubo, se empapa una cantidad definida con precisión de paños doblados con una cantidad específica de detergente de limpieza. Están completamente empapados y luego listos para su uso. A continuación, el personal del hotel limpia cada superficie con un lado fresco. Una vez que se han usado todos los lados, el empleado tira la tela y usa una nueva. Una vez limpiadas las superficies, también se pueden desinfectar las superficies de contacto.

El revestimiento del suelo de las habitaciones de hotel suele ser una alfombra; se puede limpiar de forma rápida y eficaz con una aspiradora vertical tipo cepillo. Las manchas pequeñas se pueden quitar con un producto quitamanchas. Aquí es importante trabajar de afuera hacia adentro para no esparcir la mancha. Si una habitación está desocupada durante un par de días, el método de limpieza con una lava-aspiradora también se puede utilizar para eliminar las manchas. Sin embargo, el tiempo de secado para este proceso es de seis a ocho horas.

Suelos

Los hoteles que utilizan la potencia mecánica de las fregadoras-aspiradoras con acompañante o las pulidoras monodisco para mantener los suelos limpios durante más tiempo pueden evitar la necesidad de realizar trabajos de desinfección adicionales. Para lograr el resultado de limpieza deseado sin causar ningún daño, es muy importante elegir los cepillos o almohadillas adecuados para las máquinas. Las baldosas con una estructura gruesa se friegan especialmente bien con el uso de cepillos de rodillos muy profundos, mientras que las baldosas con una estructura más fina requieren rodillos de microfibra. En habitaciones más pequeñas, se puede utilizar una pequeña limpiadora de alta presión con una lanza de espuma de copa o una máquina limpiadora de superficies grandes para la limpieza manual.

Para limpiar profundamente las paredes o las tumbonas, una limpiadora de vapor puede ser la solución ideal, dependiendo del espacio disponible. Una combinación de paños de felpa sin pelusa y una boquilla grande para suelos permiten una limpieza eficaz en áreas más grandes.

Para más información sobre limpieza, seguridad y bienestar visita el apartado Know How de limpieza efectiva en hoteles de la web de Kärcher.